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lunes, 5 de abril de 2010

EN LO SECRETO

La palabra de Dios dice en Mateo 6:6 "Mas tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público."
Con esta palabra queremos alentarte a que comiences el día. En estos versos, Jesús nos explicó cómo debía ser nuestra relación con Dios. Nuestro hermano primogénito nos hace algunas recomendaciones y hasta una promesa.
"Entra a tu aposento", habla de aquel lugar que destinamos para nuestro tiempo de oración con Dios. Un lugar apartado del resto, un lugar donde podamos tener una relación personal con nuestro Creador, sin la molestia de otras personas o cosas. Es decir, el aposento se refiere exactamente a un cuarto o habitación en el que solo podamos estar cada uno de nosotros y Dios.
Luego dice "y cerrada la puerta". Hasta en estos detalles Jesús es cuidadoso. Él sabía que si dejamos la puerta abierta, cualquiera puede entrar e interrumpir nuestro tiempo de intimidad, relación y oración con Dios. Esta es la sugerencia: tengamos la puerta cerrada. Que nadie pueda entrar, que nadie pueda interrumpirnos. La puerta no es solamente física. Puede haber en nuestras vidas otras "puertas abiertas" que molesten o interrumpan nuestros tiempos devocionales con Dios. Puede ser un celular, un hijo, un perro, una necesidad, un trabajo. Sea lo que sea, ese es un momento santo (apartado para Dios), el cual debe ser personal y no hay que interrumpirlo.
Seguidamente el verso dice: "ora a tu Padre que está en lo secreto". ¿Porqué Dios está en lo secreto? Porque quiere que le busquemos. Todo lo que esta a la vista es fácil de encontrar, pero Dios quiere ver en nosotros una necesidad y ganas de encontrarle.
Por último, y luego de las condicionantes, Jesús lanza la promesa: "y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en lo público". Dios ve nuestro esfuerzo, Dios se fija en el tiempo que le dedicamos a Él, Dios no se hace el desentendido cuando uno de sus hijos entra a su aposento y le ora en lo secreto. Él promete recompensarnos en lo público, es decir, en nuestra vida cotidiana y la gente pueda ver que vivimos una experiencia en vida.

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